martes, 9 de agosto de 2011

Parapsicología

     ¿ Que es la Parapsicología?

     El diccionario de la Real Academia Española, nos dice: que "Parapsicología es el estudio de ciertos fenómenos que van más allá de la psicología empírica". Esta definición es cierta, pero insuficiente.
     Por otro lado, un Diccionario de Ciencias Ocultas nos dice: "Parapsicología es la ciencia que estudia los fenómenos paranormales producidos por ciertos dotados, y que no tienen explicación alguna por parte de la ciencia tradicional". Esta definición nos acerca más a la realidad, pero realmente es insuficiente.
     Por tanto, la Parapsicología es la ciencia que estudia los fenómenos aparentemente inexplicables producidos por la mente. Fenómenos llamados parapsicológicos, que son exteriorizados por el subconsciente mediante cualquiera de los cinco sentidos o bien a través de nuestra propia energía generada por la potencialidad Psi.
     Están divididos en tres grandes categorías:
  • Fenómenos Psi-Kappa ó Parafísicos. Hay una acción de la mente sobre la materia.
  • Fenómenos Psi-Ganma ó Parapsíquicos. Hay una acción de la mente sobre la mente.
  • Fenómenos Parabiologicos. Hay una acción de la mente sobre los tejidosórganicos del cuerpo humano, así como sobre los animales y vegetales.
     Dado que la Parapsicología, estudia la energía generada por el hombre a través de su Psi. , Estudia también los fenómenos más complejos, en los que tienen lugar casos de telepatía, clarividencia, precognición, psicocinesia, desdoblamientos, posesiones, poltergeist, estigmas, etcétera.
     Los estudios de Parapsicología como ciencia pueden cursarse a modo de especialidad complementaria dentro de las cátedras de psicología, en Institutos y laboratorios dependientes de las facultades de psicología y también -cómo no- en Institutos y Universidades con facultades propias de Parapsicología.
     Entre unos y otros, actualmente existen más de 300 centros universitarios en los que se estudia dicha disciplina, reconocida oficialmente como ciencia en 1.969 por la American Association for the Advancement of Science (AAAS), organización ubicada en Nueva York. Ésta es la mayor institución científica mundial, y se encarga de reconocer y agrupar las entidades científicas que existen en todo el mundo, a la vez que funciona como centro donde convergen las más relevantes investigaciones de carácter experimental.
      En el mundo del esoterismo en general existe gran confusión entre términos que se refieren a los mismos conceptos. Ello es debido a épocas anteriores a la Parapsicología, cuando los primeros investigadores psíquicos empezaron a estudiar los llamados fenómenos ocultos y crearon una filosofía científica que llamaron Metapsíquica. Dentro de ésta incluyeron pequeñas ciencias, disciplinas especializadas, como la radiestesia, el magnetismo, la hipnosis, la magia, el ocultismo, etc., no por su metodología sino por los resultados o fenómenos ocultos (hoy llamados paranormales) que producen.
     La consecuencia de todo ello dio origen al nacimiento de una enigmática jerga compuesta de términos definitorios que parecen solaparse entre sí, los cuales bajo diferentes denominaciones querían decir lo mismo; por ejemplo, metagnomia y psicometría significan lo mismo, es una forma de clarividencia táctil; rabdomancia ó radiestesia define el mismo trabajo de zahorismo y constituye otra variante de la misma clarividencia táctil, etc.
     La Metapsíquica fue llamada la . Sus creadores fueron gentes pertenecientes a corrientes de pensamiento liberal-filosófico-místico. Eran fraternidades estudiosas del Antiguo Conocimiento integradas por filósofos, espiritualistas y los hoy llamados humanistas, a los que se sumaron rápidamente los técnicos y científicos investigadores de las facultades espirituales.
     Su intención era formar una síntesis de la sabiduría tradicional del ser humano y plasmar, en pocas e inmutables leyes, la enorme amplitud de conocimientos humanistas que, generación tras generación, han ido acumulándose a través de diferentes vías. Aceptada esa filosofía, la Metapsíquica es una ciencia que estudia y analiza el conocimiento de las distintas razas y pueblos detentadores de ese saber, teniendo muy en cuenta sus respectivas culturas y su historia a través tanto de hechos reales y narraciones históricas, como de contenidos simbólicos y de conocimiento hermético, haciendo un especial hincapié en la historia de las religiones, de la filosofía y de todo el concepto de la mística.
     La Metapsíquica es una ciencia que transciende las demás ciencias y formas de conocimiento habituales, va más allá (-Meta- significa < más allá >, < en otro lugar >) que el resto de las ciencias humanísticas, tanto en las profundidades del terreno psicológico, como en el estructuralismo, que pretende explicarlo todo a partir de la disposición, interrelación y funcionalidad de sus partes.
     En consecuencia, la Metapsíquica estudia los principios de las cosas espirituales y materiales, consideradas tanto desde un punto de vista abstracto o subjetivo como concreto y comprobable. La metodología no tendrá, forzosamente, que atenerse a medidas preconcebidas ni estandarizadas que exigen las demás disciplinas, sino que el estudiante metapsiquista la descubrirá por sí mismo más adelante, cuando su grado de desarrollo personal alcance un determinado grado de conocimiento.
     Sin embargo, el término de Metapsíquica es relativamente reciente. Su etimología es el resultado de la conjunción de dos vocablos griegos: Meta, que significa - después de, más allá- y Psykhikops, que significa - psíquico -; por lo tanto la Metapsíquica vendría a referirse a aquello que esta más allá de lo psíquico. El nombre fue propuesto en 1.905 por el fisiólogo francés Dr. Richet (1.850-1.935), premio Nóbel de Medicina y Fisiología en 1.913, que juntamente con los Dres. Geley, Osty, Meyers, Sauriel, Calmet, Flamarión, Roche, Tessier y otros más, fundó el Instituto Metapsíquico Internacional de París en 1.919, reconocido por el gobierno Francés como una . Más tarde se publicó la primera revista relacionada con el tema, La Revue Métapsychique.
     Lo que pretendían estos investigadores era continuar con el estudio de las facultades humanas y de los fenómenos ocultos que éstas generan. Dentro de la nueva ciencia englobaron el mesmerismo, el faquirismo, el espiritismo, la rabdomancia, la videncia, las posesiones, el vudú, el hipnotismo, etc., y todas las disciplinas que por aquel entonces eran llamadas Ciencias Ocultas.
     Los investigadores se dedicaron a estudiar todos los fenómenos Parafísicos y Parapsíquicos producidos por el hombre, y que excedían de los limites del conocimiento de la ciencia ortodoxa. Conceptuaron que éstos eran dirigidos por fuerzas psíquicas invisibles y que se manifestaban de forma inteligente, principalmente en las sesiones espiritistas guiadas por médiums.
     El alemán Dessoir cambió la denominación de Metapsíquica - mantenida desde 1.905 - por la de Parapsicología, haciendo su ingreso oficial como tal en 1.953, tras el congreso de Utrecht
     En el siglo XVIII, antes de la Revolución Francesa, dio comienzo un periodo de ilustración y de acercamiento hacia las ciencias ocultas, destacando Friedrich Anton Mesmer, hombre culto, conocedor de la Filosofa. La Teología, el Derecho y la Medicina. Fue el precursor y defensor de la hipnosis a través del Magnetismo animal, que diferenciaba claramente del físico.
     Se trataba de un método terapéutico, extravagante y a veces efectivo, basado en la teoría de que el ser humano posee una carga magnética que se podía utilizar para fines curativos.
     Mesmer, defendía la existencia de una energía eterica en el Universo, que irradiaba magnetismo y causaba el influjo mutuo entre los astros del macrocosmos, y cuya influencia afectaba al cuerpo humano como microcosmos receptor. Esta energía condicionaba, alteraba y modificaba el sistema nervioso del hombre por la fuerza de atracción que sufría, como si de un gran imán cósmico se tratara.
     El magnetismo se aplicaba a través de pases con las manos sobre los pacientes. Crea un estado alterado de conciencia en la persona que lo recibe y provoca extraordinarias reacciones psicosomáticas favorables en el organismo, que estimulan la regeneración del cuerpo y de la mente. También magnetizaban el agua de unas cubas que tenían unas varas de metal, a las cuales se agarraban las personas que acudían a ellas.
     El mesmerismo ó magnetismo animal, produce un estado de trance similar a la hipnosis y crea en el orden mental una fuerza psíquica que infiere en el organismo. Algunas técnicas psicoterapéuticas tienen una extraordinaria similitud con el antiguo método de Mesmer, pases de manos con luz apropiada, imposición de imanes y música suave. Dichos procedimientos corresponderían a la terapia de sugestión, a la color terapia, a los signos psicológicos y a la músico terapia. todo ello indica que en las terapias magnéticas influye poderosamente la capacidad de sugestión del individuo.
     Pero, las primeras referencias que se tienen sobre el magnetismo proceden de estudiosos como Agripa, Rabelais, Cardano, Paracelso, Pafre, y otros investigadores. En realidad fue Paracelso (1.493-1.541), filósofo, teólogo y médico, quién creó una doctrina, mezcla de naturalismo panteísta y un profundo conocimiento de la Naturaleza, en torno a los poderes terapéuticos del imán. Sobre esta base expuso la tesis de que la vida era alentada y regulada por la energía sideromagnética procedente de los astros. En sus campañas militares, como médico del ejército y aventurero por tierras de Asia, África y Europa, efectuó espectaculares curaciones de heridos y enfermos, realizó amputaciones y operaciones quirúrgicas valiéndose solamente del magnetismo. Estas curaciones fueron consideradas, en el siglo XVI, como auténticos milagros.
     El primer texto publicado sobre magnetismo del que se tiene constancia es el escrito en 1.636 por el matemático Daniel Schwenter, con el título de Deliciae Physicomatematique. En él se enseñaba como amansar a una gallina huraña por medio de pases magnéticos. En 1.646, el jesuita Anastasius Kircher (1.601-1.680) llevó a cabo la misma experiencia mejorada, a la que llamó el < el gallo encantado> y la expuso en su libro Magnus, Lucis et Umbrae.
     Tras su fallecimiento en 1.815, Mesmer deja gran cantidad de seguidores, no sin antes descubrir junto a su discípulo Armand de Puysegur el sonambulismo. Entre sus seguidores destacan: Kerner Karl Von Reichembarch, el coronel De rochas, Jhon Elliotson, James Esdaile, etc. que utilizaron el sonambulismo como anestesia
     James Braid, cirujano de Manchester (Inglaterra), comprobó como sin necesidad de magnetizar a la persona, esta podía ser dormida y quedar sometida a un estado que él mismo bautizó con el nombre de hipnotismo.
     De igual modo logró demostrar que el sólo hecho de mirar fijamente un objeto inmóvil, se podía alcanzar el trance hipnótico. Según James Braid, el hipnotismo era un estado de sueño nervioso. El fenómeno de la hipnosis fue ampliamente investigado por Jeam Martín Charcot (1.825-1.893), llegando a la conclusión de que era una manifestación patológica de la histeria. Separó al hipnotismo en mayor y menor, comprendiendo el primero tres estados característicos (letergia, catalepsia y sonambulismo), mientras que el segundo, sólo produce manifestaciones psíquicas pero no motóricas.
     Al paso de las teorías de Charcot salen un grupo de médicos encabezados por Bernheim y Liebanet, fundadores de la Escuela de Nancy, que investigando a fondo la hipnosis, llegaron a la conclusión de que el estado hipnótico era un fenómeno de sugestión, mediante el cual se podría estimular al sujeto para que desarrollase sus facultades y produjese fenómenos psíquicos.
     De esta forma, el fenómeno hipnótico queda enmarcado hasta nuestros días, siendo perfeccionado por otros investigadores como Sanet, Myess, Ochorowicz y Binet.
     Remontándonos a los antiguos libros sagrados de todas las religiones del mundo, encontramos múltiples referencias a la existencia de otra vida espiritual del ser humano. La misma creencia se da en posteriores civilizaciones de la edad antigua, media y moderna. Son filosofías animistas que han persistido a lo largo de diversas eras, pero ninguna puede ser tenida suficientemente en cuenta por falta de datos fidedignos, por eso solamente podemos saber de los dos últimos siglos sobre los que si existen suficientes elementos de trabajo.
     El 31 de mayo de 1.848, las hermanas Margaret y Kate Fox de 15 y 11 años de edad respectivamente, tuvieron las primeras experiencias de comunicación con seres inmateriales. Ocurrió en su pequeña casa de campo, en Hydesville (Nueva York), a través de misteriosos golpes que daban en las paredes de una habitación primero, y después en los objetos de una casa. Eran golpes producidos, supuestamente, por entidades espirituales desencarnadas que, mediante el lenguaje de los golpes (Raps), se definían como < espíritus libres >.
     Este fenómeno no fue casual puesto que la casa en la que habían ido a vivir en 1.847 ya tenia fama de ser un lugar encantado. El anterior inquilino había oído golpes misteriosos y huyó despavorido. Con este hecho se produjo el surgimiento del movimiento espiritista, el cual se presento oficialmente en 1.849, en el auditorio de la ciudad de Rochester (Nueva York). Un año más tarde, el verano de 1.850, el periódico Tribune lo dio a conocer al mundo.
     En 1.855 en Francia, entró en escena el Dr. Hippolyte Rivaldi, más tarde conocido por el seudónimo de Allan Kardec. Del resultado de sus conocimientos obtenidos en sesiones espiritas rudimentarias, en las que estudiaba el movimiento de las mesas y cómo se producían las comunicaciones a través de la escritura automática, llegó a conclusiones positivas de la existencia de dichas entidades desencarnadas y creó el cuerpo filosófico que dio origen al espiritismo.
     Allan Kardec codificó el sistema de comunicación entre seres vivos y los espíritus desencarnados. A partir de 1.856 creó la nueva religión llamada Espiritismo, la que divulgó a través de revistas y libros monográficos, de los que sobresalen dos: El libro de los Médiums y El libro de los Espíritus, considerados dos auténticas Biblías de la filosofía espiritista. El resultado de todo ello fue la propagación de la nueva religión por Francia, Alemania, Inglaterra y América, donde arraigó con fuerza, especialmente en los países latinoamericanos.
     En Europa, en los albores del siglo XX, un médico alemán llamado Keener escribía textos sobre el mundo del espiritismo utilizando como base informativa comunicaciones efectuadas a través de una persona sensitiva. De esta forma surgió la figura del médium, un necesario traductor físico y psíquico que, colocado bajo estado de trance, tenía la facultad de mediar entre el mundo material, sensible, y el inmaterial o suprasensible.
     Intelectuales y científicos se interesaron por el estudio de esta nueva creencia filosófica, religiosa y, aparentemente, sobrenatural. El movimiento espiritista se expandió por el mundo durante los últimos cincuenta años del siglo XIX, dando lugar a un buen numero de médiums que modelaban y regurgitaban formaciones de fantasmas, de tipo ectoplasmático, sin llegar a probar la existencia real metafísica de los espíritus encarnados ni convencer al mundo científico.
     Participaron en las investigaciones prestigiosos científicos como el catedrático suizo de psicología Dr. Théodore Flournoy; el premio Nóbel francés Charles Richet, descubridor de los mecanismos auto inmunitarios de los microbios frente a los fármacos; el astrónomo francés Camille Flammarión; el psicólogo John Beloff de la Universidad de Edimburgo; el prestigioso psicólogo americano Dr. William James; el investigador y escritor Hereward Carrington; los científicos fundadores de la Society for Psychical Research (S.P.R.) Myers, Henry Sidgwick y Edmund Gurney; el escritor sir Arthur Conan Doyle, creador del famoso Sherlock Holmes, y una interminable lista de personajes de la ciencia y la cultura, hasta acabar por el mismísimo psicólogo y biólogo Dr. Joseph Banks Rhine, de la Universidad de Duke, padre de la Parapsicología.
     Se realizaron miles de experimentos en Europa y América, tras lo cual, por falta de pruebas convincentes sobre la existencia real de comunicación con los espíritus, el interés decreció coincidiendo con la entrada del siglo XX. Se volvió a reactivar tras la I Guerra Mundial debido al alto numero de muertos en circunstancias trágicas, por lo que los parientes vivos querían comunicarse con ellos para conocer en qué situación se encontraban, aunque poco a poco dicha praxis fue perdiendo notoriedad.
     El movimiento espiritista continuó vigente en Estados Unidos, y en Brasil arraigó profundamente como religión. Sin embargo, en el resto del mundo quedó como fenómeno de experimentación popular y siguieron practicándose sesiones de comunicación con los espíritus, básicamente con el tablero < OUIJA > (término resultante de la contracción de los vocablos francés Ouy y alemán Ja, que significan Si).
     El movimiento espiritista no estuvo organizado de forma sistemática hasta que apareció Hippolyte Leon Denizard Rivaldi. Este brillante doctor en medicina, nacido en Lyon el 3 de Octubre de 1.804, asistió por primera vez a una sesión espiritista en Mayo de 1.855 en casa de madame Plaunemaison. Llevado por el criterio analítico propio del científico se lanzó al estudio de estosf hechos e investigó con detenimiento los fenómenos de golpes de banquetas, movimientos de mesas, Ouija, escritura automática, etc. Una vez comprobada la realidad de los hechos, llegó a la conclusión de que estaban causados por espíritus desencarnados.
     En principio dedujo que existía una fuerza magnética, íntimamente ligada al espíritu. Que era utilizada como medio energético a través del cual ellos se manifestaban y producían los misteriosos fenómenos. Su convicción fue reafirmada cuando en una sesión el 30 de Abril de 1.856, un espíritu llamada Verdad le comunicó que él era el hombre elegido para cumplir una importante misión: crear una nueva religión y reformar a la humanidad de esta nueva doctrina, el espiritismo. A partir de entonces adoptó el seudónimo de Allan Kardec, el nuevo profeta del espiritismo.
     En 1.856 fundó la publicación especializada < Revista Espiritista >, a través de la cual difundió la nueva doctrina espirita. En abril de 1.857 explicó en su primer libro, El libro de los Espíritus, la realidad del mundo del espiritismo.
     Posteriormente, en sendas sesiones espiritistas, llevadas a cabo en Junio de 1.856 y en Abril de 1.860, le confirmaron a Allan Kardec que él era el hombre elegido por los espíritus para transmitir estos conocimientos a la humanidad.
     Todo ello le transformó en el gran codificador del espiritismo y en 1.859 publicó su segundo libro, ¿ Qué es el Espiritismo?. En 1.861, el tercero, El libro de los Médiums. A éstos le siguieron varios más hasta que en 1.868 publicó El Génesis, siempre en busca de revelar la realidad de una vida espiritual existente más allá de la muerte.
     Allan Kardec viajó mucho por el mundo propagando la filosofía espirita y creando multitud de centros espiritistas. En su periplo incluyó España, donde las consecuencias fueron ciertamente desagradables a raíz de la intervención, en Barcelona, del Santo Oficio de la Iglesia Católica, el cuál llevó a cabo un genocidio cultural como una forma más de intolerancia y dogmatismo religioso.
     Allan Kardec murió a los 65 años, en Marzo de 1.869, tras haber conseguido comunicar al mundo el nacimiento de una nueva filosofía religiosa, el espiritismo, hoy en día seguida por millones de almas en todo el mundo.
     Como consecuencia de la fenomenología desarrollada en las sesiones medíumnicas, se inician una serie de experimentaciones por parte de los científicos de la época que intervenían en las sesiones, a fin de investigar y esclarecer los fenómenos acontecidos.
     En 1.869, la Sociedad Dialéctica de Londres, decidió interesarse por los fenómenos parapsicológicos de efectos físicos que se producían en las sesiones medíumnicas, llegando a las siguientes conclusiones:
  • Producción de sonidos sin causa aparente de naturaleza física.
  • Cuerpos sólidos que se desplazan sin contacto material con ellos.
  • Los sonidos respondían a preguntas mediante un código establecido.
  • Tales mensajes eran referidos generalmente a hechos conocidos por uno de los asistentes.
     Estas afirmaciones causaron sensación en ámbitos científicos, decidiendo ser ellos quien las comprobasen. Así Sir William Crookes inició en 1.869 una valiosa investigación logrando resultados en el curso de sus experimentaciones con varios médiums, entre los que destacaban Daniel Douglas Home y Florence Cook. Se dedicó a investigar la fenomenología producida por ambos médiums, mediante aparatos muy sensibles, llegando a observar manifestaciones nuevas, o al menos no estudiadas científicamente hasta entonces.
     Sir William Crookes, expuso sus conclusiones en dos obras: Experimental Investigación on Psychical (publicado en 1.871) y researches on the Phenomena of Spiritualism (publicado en 1.874), llegando a demostrar que en los fenómenos intervenían una fuerza psíquica que, según él, era emanada por el propio cuerpo de los médiums.
     Así pues, gracias a los trabajos de Sir William Crookes, otros investigadores siguen sus pasos y es así, como se inicia en la época la investigación científico/experimental del la Parapsicología, llamada por aquella época " Investigación Psíquica ".
     El 20 de febrero de 1.882, se fundó en Londres la Society for Psychical Research ( S.P.R.), dedicada al estudio de los fenómenos psíquicos, siendo elegido primer presidente Henri Sidgwik. Los trabajos de la S. P. R. salieron a la luz por vez primera en 1.886, con su obra Phanthasmas of the livings. Se hicieron grandes investigaciones con médiums, entre ellos, destacaba la italiana Eusapia Palladino. En presidencia de la S. P. R. se sucedieron grandes personalidades de la ciencia, como Charles Richet, Bergson y Flamarion.
     Tres años después nace en América la filial de la S. P. R. denominada American Society for Psychical Research (A.S.P.R.), fundada por el psicólogo William James junto a otros colegas destacando entre ellos a R. Hogson y S. Hall.
     En 1.919 se funda en París el Instituto Metapsíquico Internacional (I.M.I.), siendo su director científico Geley, que junto al médium polaco Klusky, obtuvo materializaciones de diferentes partes del cuerpo. Muerto Geley le sustituye en el cargo Eugéne Osty, médico parisino y famoso en el campo de la investigación paranormal. Realiza investigaciones psíquicas con los médiums Guzik y Schemeider, investigando los fenómenos de telepatía y clarividencia, así como los de ESP, a los que él denominó metagnomía. Dirigió la revista del I. M. I. denominada Metapsíquica.
     Un miembro de la Academia de Ciencias Francesa y presidente honorario del Instituto Metapsíquico Internacional (I.M.I.), el doctor Charles Richet (1.850-1.936) Catedrático de fisiología y médico, descubrió en 1.902 la anafilaxis (fenómeno que se encuentra en la raiz de las enfermedades alñergicas), con la que le concedieron el premio Nóbel de la medicina en 1.913 - escribió en 1.922 el Tratado de Metapsíquica, donde divide los fenómenos en objetivos (físicos) y subjetivos (psíquicos). Creía en la existencia de un sexto sentido como explicación racional de las dotes parapsíquicas y pudo observar a sensitivos tan notables como Eusapia Palladino.
     Es gracias al Dr. Richet al que se deben los primeros trabajos completos sobre telepatía experimental, dentro de los cuales son famosas sus investigaciones con soldados en los frentes de guerra. Fue el primero en introducir en el estudio de lo paranormal el método cuantitativo. Este ejemplo sería seguido en Francia por Rene Warcollier y en los Estados Unidos por Joseph Banks Rhine.
     Otro miembro del I. M. I. que además obtuvo la presidencia fue Rene Warcollier. Destacó por sus trabajos en torno a la telepatía. Sus investigaciones fueron de enorme valor para la demostración de la existencia de la Percepción Extra Sensorial (P. E. S.), adelantándose en este campo a los trabajos de Rhine.
     Un investigador polaco el Dr. Ochorowicks realizó un magnifico análisis sobre la telecinesis con una joven sensitiva de nombre Stanislava Tomczyk. Los resultados obtenidos fueron avalados por una comisión integrada por profesores, ingenieros y fisiólogos. En 1.909 se llevó a cabo un estudio en el laboratorio de física del Museo de Industria y Agricultura de Varsovia, siendo este de resultado positivo, pues Stanislava era capaz de hacer levitar objetos diversos encerrados en una campana de cristal.
     Otro gran investigador de la época fue el austríaco de origen judío Sigmund Freud , que desde muy joven se intereso en los fenómenos paranormales, lo cual le llevó en su época a que le tacharan de ocultista, pero al no encontrar ningún incentivo en el tema no profundizó en él.
     En 1.876 llevó a cabo investigaciones sobre anatomopatología y fisiología del Sistema Nervioso Central humano. En 1.884 descubrió las propiedades analgésicas y anestésicas de la cocaína y al año siguiente una beca le permitió trasladarse a París, donde fue discípulo de J. M. Charcot, cuyos estudios sobre la aplicación del hipnotismo y la sugestión en el tratamiento de la histeria ejercieron gran influencia en sus primeros trabajos. De regreso a Viena en 1.866, colaboró con el psiquiatra J. Breuer y se casó con Martha Bernays, con quien tuvo seis hijos. Ç
     Freud comenzó a investigar sobre el sistema nervioso central de los invertebrados, en el laboratorio de fisiología que dirigía el médico alemán Ernst Wilhelm von Brücke. Estas investigaciones neurológicas fueron tan absorbentes que Freud descuidó sus obligaciones académicas, permaneciendo en la facultad tres años más de lo habitual antes de obtener su licenciatura en Medicina.
     En 1881, después de cumplir un año de servicio militar obligatorio, finalizó su licenciatura. Sin embargo, no quiso abandonar el trabajo experimental y permaneció en la universidad como ayudante en el laboratorio de fisiología. En 1883, presionado por Brücke, se vio obligado a abandonar la investigación teórica.
     Así, Freud estuvo tres años en el Hospital General de Viena, dedicándose sucesivamente a la psiquiatría, la dermatología y los trastornos nerviosos. En 1885, tras su designación como profesor adjunto de Neuropatología en la Universidad de Viena, dejó su trabajo en el hospital. A finales del mismo año, recibiría una beca del gobierno para estudiar en París diecinueve semanas junto al neurólogo Jean Charcot, que a la sazón trabajaba en el tratamiento de ciertos trastornos mentales mediante la hipnosis, en el manicomio de Salpêtrière del que era director. Los estudios de Freud con Charcot, centrados en la histeria, encauzarían definitivamente sus intereses hacia la psicopatología, el estudio científico de los trastornos mentales.
     En 1886 Freud se estableció como médico privado en Viena, especializándose en los trastornos nerviosos. Sufrió una fuerte oposición de la clase médica vienesa por su defensa del punto de vista de Charcot sobre la histeria y el uso de la hipnosis, entonces considerados como enfoques poco ortodoxos. El enfrentamiento resultante retrasó la aceptación de sus hallazgos posteriores sobre el origen de las neurosis.
     El primer trabajo publicado de Freud sobre psicopatología, Sobre la afasia, apareció en 1891; era un estudio de este trastorno neurológico en el que la capacidad para pronunciar palabras o nombrar objetos comunes se pierde como consecuencia de una enfermedad orgánica en el cerebro. Su último trabajo sobre neurología, el artículo, 'Parálisis cerebrales infantiles', fue escrito para una enciclopedia en 1897 sólo por la insistencia del editor, porque en aquel momento Freud estaba más ocupado en las explicaciones psicológicas de las enfermedades mentales que en las fisiológicas. Sus trabajos posteriores se inscriben enteramente en ese terreno, que él mismo había bautizado como psicoanálisis en 1896.
     Esta nueva orientación de Freud se dio a conocer por vez primera en su trabajo Estudios sobre la histeria (1893), elaborado en colaboración con el médico vienés Josef Breuer, que dos años después se publicaría con mayor extensión. Se consideraban los síntomas de la histeria como manifestaciones de energía emocional no descargada, asociada con traumas psíquicos olvidados. El procedimiento terapéutico consistía en sumir al paciente en un estado hipnótico, para forzarle a recordar y revivir la experiencia traumática origen del trastorno, con lo que se descargarían por catarsis las emociones causantes de los síntomas. La publicación de esta obra marcó el comienzo de la teoría psicoanalítica, formulada sobre la base de las observaciones clínicas.
     Durante el periodo de 1895 a 1900, Freud desarrolló muchos de los conceptos posteriormente incorporados tanto a la práctica como a la doctrina psicoanalítica. Poco después de la publicación de los estudios sobre la histeria, Freud abandonó el uso de la hipnosis como procedimiento catártico, para reemplazarlo por la investigación del curso espontáneo de pensamientos del paciente -llamado asociación libre-, como método idóneo para comprender los procesos mentales inconscientes que están en la raíz de los trastornos neuróticos.
     En sus observaciones clínicas, Freud halló evidencias de los mecanismos mentales de la represión y la resistencia, describiendo la primera como un mecanismo inconsciente que hace inaccesible a la mente consciente el recuerdo de hechos dolorosos o traumáticos; y la segunda como la defensa inconsciente contra la accesibilidad a la consciencia de las experiencias reprimidas, para evitar la ansiedad que de ella se deriva.
     Freud propuso seguir el curso de los procesos inconscientes, usando las asociaciones libres del paciente como guía para interpretar los sueños y los lapsus en el lenguaje (además de chistes, actos fallidos, etc). Mediante el análisis de los sueños llegó a sus teorías sobre la sexualidad infantil y el complejo de Edipo, que explicaría el apego del niño al progenitor del sexo contrario, junto con los sentimientos hostiles hacia el del propio sexo (considerado -en principio- un rival). Estos planteamientos, que hacían hincapié en la base biológica del comportamiento humano -particularmente el sexo y la agresividad-, fueron muy controvertidos.
     En estos años, desarrolló también la teoría de la transferencia, proceso por el que las actitudes emocionales, establecidas originalmente hacia las figuras de los padres durante la infancia, son transferidas en la vida adulta a otros personajes (maestros, autoridades, jefes, el propio psicoanalista, etc.). El final de este periodo viene marcado por la aparición de su obra más importante, La interpretación de los sueños (1900 primera edición, que posteriormente el mismo Freud ampliaría). En ella analiza (además de algunos sueños de sus pacientes, amigos, hijos, e incluso de personajes famosos) muchos de sus propios sueños, registrados durante tres años de autoanálisis iniciados en 1897. Este trabajo expone todos los conceptos fundamentales en que se asientan la teoría y la técnica psicoanalítica.
     En 1902 Freud fue nombrado profesor titular de la Universidad de Viena. Este honor no era, sin embargo, debido al reconocimiento de sus aportaciones, sino como resultado de los esfuerzos de un paciente con influencias. El mundo médico todavía contemplaba su trabajo con hostilidad, y sus siguientes escritos, Psicopatología de la vida cotidiana (1904) y Tres ensayos para una teoría sexual (1905), no hicieron más que aumentar este antagonismo. Como consecuencia, Freud continuó trabajando virtualmente solo, en lo que él mismo denominó "una espléndida soledad ".
     Sin embargo, hacia 1906, Freud contaba ya con un reducido número de alumnos y seguidores destacando los psiquiatras austriacos William Stekel y Alfred Adler, el psicólogo austriaco Otto Rank, el psiquiatra estadounidense Abraham Brill, y los psiquiatras suizos Eugen Bleuler y Carl Jung, además del húngaro Sándor Ferenczi, que se unió al grupo en 1908.
     El creciente reconocimiento del movimiento psicoanalítico hizo posible crear en 1910 una organización de ámbito mundial denominada Asociación Psicoanalítica Internacional. Mientras el movimiento se extendía, ganando adeptos en Europa y Estados Unidos, Freud estaba preocupado por las disensiones aparecidas entre los componentes de su círculo original, sobre todo las de Adler y Jung, cada uno de los cuales desarrolló una base teórica diferente en desacuerdo con la tesis de Freud sobre el origen sexual de las neurosis. Freud se enfrentó a estas posturas desarrollando sus conceptos básicos y sus puntos de vista en publicaciones y conferencias.
     Tras el comienzo de la I Guerra Mundial, Freud abandonó casi la observación clínica y se concentró en la aplicación de sus teorías a la interpretación psicoanalítica de fenómenos sociales, como la religión, la mitología, el arte, la literatura, el orden social o la propia guerra. En 1923 se le detectó un cáncer en la mandíbula que precisó de un tratamiento constante y doloroso, por el que tuvo que someterse a varias operaciones quirúrgicas. A pesar de estos sufrimientos, continuó su actividad durante los dieciséis años siguientes, escribiendo principalmente sobre asuntos filosóficos o culturales.
     Cuando los nazis ocuparon Austria, en 1938, Freud se trasladó con su familia a Londres, donde falleció el 23 de septiembre de 1939.
      La principal contribución de Freud fue la creación de un enfoque radicalmente nuevo en la comprensión de la personalidad humana, al demostrar la existencia y poder de lo inconsciente. Además, fundó una nueva disciplina médica y formuló procedimientos terapéuticos básicos que, más o menos modificados aún se aplican, en el tratamiento mediante psicoterapia de las neurosis (y, parcialmente, de las psicosis). Aunque nunca conoció en vida un reconocimiento unánime, y ha sido a menudo cuestionado desde entonces, Freud es indudablemente uno de los grandes pensadores del mundo contemporáneo.
     Entre otros de sus trabajos habría que destacar Tótem y Tabú (1913), Más allá del principio del placer (1920), Psicología de masas (1920), El yo y el ello (1923), El malestar en la cultura (1930), El porvenir de una ilusión (1927), Introducción al psicoanálisis (1933), y Moisés y el monoteísmo (1939).
     En 1.908 fundó la Sociedad Psicoanalítica de Viena, que agrupó a sus principales discípulos entre los que se encontraban O. Rank, C. J. Jung y A. Adler, y que posteriormente la mayor parte de ellos se separaron posteriormente del maestro y crearon sus propias escuelas psicoanalíticas.
     Posteriormente retoma el interés que tenia de joven por los fenómenos paranormales, ingresando en 1.911 como miembro de la S. P. R., y en 1.915 en su filial americana la A. S. P. R.
     La actitud de Freud respecto a la Parapsicología queda latente con una frase suya incluida en una carta enviada a H. Carrignton: "Si tuviese la oportunidad de volver a nacer, me dedicaría a la investigación psíquica antes que al psicoanálisis"
     Al contrario que Freud, Carl Gustav Jung psicólogo suizo, no tuvo ningún tipo de prejuicios a la hora de afrontar los fenómenos paranormales.
     Discípulo de Freud, rompió luego con éste para crear su propia escuela, en parte por su opuesta personalidad y en parte por diferencias en sus puntos de vista.
     Jung era un dotado de efectos físicos, hasta el punto de amedrentar al propio Freud. Tuvo numerosas experiencias de Dejá-vú, pero los fenómenos que caracterizan el sentimiento parapsicólogico de Jung, fueron la precognición y retrocognición, mediante sueños y visiones, previendo importantes fechas de su vida.
      Fue considerado por los metapsiquistas -primero- y los parapsicólogos -después- como el teórico que sustituyó el principio de causalidad por el de sincronicidad para explicar el fenómeno Psi. Cooperó también en difundir la tesis de que los fenómenos espiritistas no son manifestaciones reales de espíritus, sino que su explicación hay que buscarla en el inconsciente humano.
     Posteriormente vinieron otros grandes investigadores que ayudaron a sentar las bases de lo que sería después la moderna Parapsicología. Entre ellos estaba el Dr. Myer, que fue el primero en utilizar el término telepatía en 1.883; el Dr. Gilber, con sus sesiones de hipnotismo contribuyó a mejorar el estudio de los dotados psíquicos, atrayendo la atención de otros interesados como Janet.
     En 1.920 William Mc Dougall es elegido presidente de la S. P. R. y posteriormente es llamado desde la Universidad de Harvad, para cubrir el cargo de titular de la Cátedra de Psicología. En 1.927 se traslada a Durham (Carolina del Norte) para dirigir el instituto y la facultad de Psicología de esta Universidad llamada también Universidad de Duke.
     Mc Dougall llama al que fue su alumno más aventajado en Harvard, para encomendarles la dirección del laboratorio de parapsicología de Duke. Este era Joseph Banks Rhine, doctor en botánica y catedrático de fisiología vegetal en West Virginia. Rhine fue el primero que, junto con su esposa Logias E. Rhine -también botánica y naturalista- aplicó el método científico a la producción y evaluación de la fenomenología parapsicológica, demostrando que los fenómenos parapsicológicos eran verificables matemáticamente. Rhine tuvo el acierto de tomar una dirección totalmente nueva y de apariencia revolucionaria, con referencia a cuanto se había realizado hasta ese momento en otros países. La Parapsicología moderna, científica, había nacido.
     Con su nuevo método, dio preponderancia a las investigaciones cuantitativas sobre las cualitativas. Gracias a Rhine y a la utilización del cálculo de probabilidades y la estadística, la Parapsicología se introdujo en el mundo científico, para ponerlo al corriente de la existencia de fenómenos que anteriormente eran negados por definición.
     En 1.937 funda el Journal of Parapsichology. En 1.950 abandona su cátedra de parapsicología, dedicándose exclusivamente al laboratorio, transformado en 1.965 en Instituto de Parapsicología. El 30 de Diciembre de 1.969, la Parapsichological Association -de la que él forma parte- obtuvo el reconocimiento científico oficial, incluyéndose en la "American Association for the Advacement of Sciencie" una de las más importantes sociedades científicas del mundo.
     Jamás la Parapsicología podrá agradecer a Rhine su trabajo y abnegación en pro de la misma, incluyéndola en los ámbitos científicos. No en vano es reconocido por los parapsicólogos como " El padre de la Parapsicología Científica ".
     El matrimonio Rhine al llegar al departamento dirigido por Mc Dougall, e incorporarse a los experimentos que allí se realizaban, diseñaron una baraja especial de naipes consistente en 5 tipos de dibujos: cuadrado, círculo, ondas, cruz y estrella. Se las denominó baraja Zener en honor a uno de los científicos compañeros del matrimonio Rhine. Este sistema de cartas, ha sido utilizado en la experimentación PES por la totalidad de los parapsicólogos.
     Wilheim Heinrich Carl Tenhaeff impartió clases de Parapsicología en la Facultad de Psicología de la Universidad de Utrecht, siendo en 1.928 el encargado de realizar un curso de parapsicología, obteniendo dicho curso gran fama en toda Europa. La facultad de Psicología pasó posteriormente a Convertirse en 1.935 en Instituto de Parapsicología autónoma a la Universidad, siendo el primer Instituto de Parapsicología de Europa.
     Wilheim Heinrich Carl Tenhaeff al contrario que Rhine, utilizaba en sus investigaciones el método cualitativo, pero con el inconveniente de que dicho método y su constatación era más problemático, no permitiendo, en general, obtener conclusiones globales y satisfactorias.
     Su formación científica se inició en el espiritismo, pasándose posteriormente a la Psicología. Después de leer el libro Personalidad humana y su supervivencia, de Myers, abandonó todo para dedicarse exclusivamente a la investigación dentro del campo de la Parapsicología.
     En 1.953 se crea la primera Cátedra de Parapsicología en el mundo, siendo Tenhaeff su titular. siendo considerado uno de los más importantes personajes del campo de la Parapsicología de todos los tiempos.
     Hans Bender es uno de los parapsicólogos de mayor prestigio de la era científica, junto a Rhine y Carl Tenhaeff.
     En 1.954 fundó el Instituto para los territorios Límite de la Parapsicología y la Higiene Mental, transformado posteriormente en Instituto y Cátedra de Parapsicología. Bender mantiene una serena posición de equidistancia entre los métodos cualitativos de Tenhaeff y los cuantitativos de Rhine.

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