Consciencia

     Consciencia es la síntesis de varias actividades psíquicas que se integran, dando lugar a una experiencia sensible inmediata del presente representado.

     Existe una conciencia Vigilante (C. V) y en contraposición a ésta, una conciencia Onírica (C. O.). En ella tendríamos varios estados intermedios o niveles, desde la conciencia extrema de atención pasando por la fluctuante o de ensoñación y terminando en la perdida de conciencia o estado de ensoñación (onírico). Esto aunque esta muy definido, no ésta aún muy claro para las ciencias médicas o psicológicas, ya que se han encontrado con características extrañas en algunos niveles de conciencia, característica que no se les suponían.

     Según Freud (padre del psicoanálisis), se pueden distinguir tres niveles en el campo de los sucesos ocurrentes en la consciencia. Serían sucesos que pueden estar presentes al mismo tiempo en la consciencia, siendo estos limitados. Esta limitación definiría dos órdenes de hechos psíquicos, los conscientes (los presentes en un momento dado en el campo de la conciencia) y los preconscientes (los que provisionalmente se encuentra fuera del campo de la consciencia, y por tanto, fuera del campo de la atención).

     Los estados y niveles de consciencia tienen, para la medicina y la psicología, una indiscutible base neurofisiológica y están en relación con la actividad y condiciones de los centros nerviosos corticales y subcorticales.

     En psicolopatología, los trastornos de la consciencia, según la neuropsicología, son esencialmente trastornos del nivel vigilante, y es en ellos donde se produciría una insuficiencia o alteración para reconocer el significado de una experiencia, en las coordenadas espacio-temporales.

     Por todo ello, tenemos que el principal estado alterado de conciencia es la Percepción Extrasensorial. Siendo ésta una serie de sensaciones recibidas fuera de los sentidos habituales, por lo tanto, fuera del estado de conciencia vigil. Podríamos tomar la P. E. S. como modelo o punto de partida para los estados alterados de conciencia.

     Un estado alterado de conciencia (E. A. C.), es algo muy difícil de explicar, seria una experiencia vivida muy intensa, y ante todo subjetiva. Suele ser una situación producida en estado onírico.

     Según una definición que dio Arnold Ludwig acerca de los E. A. C., " es cualquier situación mental inducida por medios o agentes fisiológicos, farmacológicos o psicológicos, que pueda ser reconocida por el sujeto o un observador objetivo, como suficientemente desviada, tanto en la experiencia subjetiva, como en el funcionamiento psicológicos de este sujeto en estado de vigilia "

     Por tanto, un estado alterado de consciencia (E. A. C.) es un estado en el cual se producen una serie de actuaciones que no se dan en el estado normal consciente, y del que el sujeto no es, aparentemente, responsable.

     Para lograr un estado alterado de consciencia podemos usar varias técnicas diferentes, pero que bien se complementan, o bien todas tienen idéntica finalidad:

• Reducción de la estimulación ambiental y motora. Consistente básicamente en colocar al sujeto en reposo, aislándole al máximo de su entorno.
• Aumentar la estimulación ambiental y la actividad motora. Por lo general esta estimulación se consigue por medio de bailes, danzas, drogas, etc. .
• Abstramiento mental. Se consigue básicamente en mirar fijamente a un punto fijo, hasta lograr el máximo aislamiento.
• Disminuir la vigilancia y la capacidad crítica.
• Ingerir drogas o productos químicos.

     Ante un estado alterado de consciencia (E. A. C.), en el sujeto se producen algunos cambios o alteraciones. Aumenta la emotividad, dejando a un lado la lógica y el raciocinio, dando rienda suelta a nuestras emociones internas. Nuestra percepción del espacio/tiempo tridimensional se ve afectado, pudiendo recibir nuevas y distintas señales. Perdemos la capacidad -o parte de ella - del autocontrol. De algún modo ceden las represiones sociales y afloran otras formas de pensar y sentir. Aumenta la expresión emocional. Se alteran (cambiamos) el significado de las cosas. Aumenta la sugestionabilidad.

¿ Cómo conseguimos un E. A. C.?

     Básicamente se consiguen de dos formas por un lado tendríamos los psicopatológicos, como el sueño, enfermedad psicofísica, etc., y por otro tendríamos los voluntarios producidos voluntariamente a través de la hipnosis, relajación, meditación, etc. Ambas categorías están íntimamente interrelacionadas, encontrando entre las principales:

     RELAJACION. Es el estado menos profundo. Se produce voluntariamente y consiste en que el sujeto se aísla de su entorno. Para ello, adopta una posición cómoda que le permita descargar toda la tensión de su cuerpo. Con esto, se consigue que la mente esté descargada y liberada. Podríamos decir que es el primer paso en los E.A.C.

     MEDITACION. Consiste en un estado de relajación, en el que el sujeto intenta centrar todo su intereés en una cuestión. Se produce una gran descarga de ondas alfa, y se pueden visualizar otros planos.

     SUEÑOS PSICODELICOS. Son los inducidos por alucinógenos. El sujeto ve alterada su conciencia por estas sustancias. Sufre alucinaciones y visualizaciones, incluso cambios en su esquema espaciotemporal, pero no son reales.

     SUEÑO.  Es el estado más corriente de la alteración de conciencia. Se produce una pérdida de la conciencia. Hay varias fases dentro del sueño. En una de ellas, más o menos el 20 % del sueño, se produce un estado M.O.R., es la ensoñación, en la que el sujeto vive situaciones distintas.

      HIPNOSIS. Estado de sugestionabilidad en el que el sujeto pierde conciencia, pero puede no acceder al estado de vigilia. Puede ser voluntqario o involuntario. No se conoce aún lo suficientemente, pese a ser utilizado masivamente por varias disciplinas de la salud. En realidad, la persona no está dormida ni tampoco despierta. Áquí es donde radica la parte oculta del tema.

 

     MISTICO. Sería el estado más profundo de alteración de la conciencia. Según parece, el sujeto sufre una serie de transformaciones psicofísicas. Para los creyentes cristianos, el sujeto toma contacto con la Divinidad. Se conoce poco de él, puesto que las únicas referencias disponibles son las experiencias vividas por los propios místicoos, nunca muy dispuestos a expresarlas.

 

     TRANCE HIPNOTICO. Se trata de un estado de relajación entre el sujeto hipnotizado y el sujeto hipnotizador. De alguna manera, este cede su voluntad a la del hipnólogo. En el trance hipnótico el sujeto no se cuestiona ninguna orden dada por el hipnólogo, simplemente la obedece. Por supuesto que no obedecerá cualquier orden, siempre y cuando este atente contra su dignidad física o moral. Se produce una disminución de la capadidad de reacción.

     En el trance hipnótico se produce una mayor afluencia de ondas alfa, así mismo, el sujeto puede dormirse, o no. Lo que sí esta muy claro es que si una persona no desea ser hipnotizada, no lo será, sea quien sea el hipnólogo.

     Hay varios grados de hipnosis. El más profundo y extraño sería la regresión. En algunos casos el sujeto parece haber vuelto a otra vida, a otra encarnación. Este punto no es veraz para la mayor parte de los hipnólogos y parapsicólogos prestigiosos, pero tampoco aluden implícitamente al fraude.